Los fraudes internos son más comunes que lo que muchos líderes en altos rangos piensan. Descubra cómo proteger su negocio.
Generalmente, las autoridades en las empresas subestiman la probabilidad de que los fraudes ocupacionales puedan afectar a su organización. Sin embargo, un informe llevado a cabo en el 2020 por la Association of Certified Fraud Examiners (ACFE) sugiere que la empresa promedio presenta pérdidas del 5% de sus ingresos al año por fraudes.
Los fraudes ocupacionales, también llamados "fraudes internos" o "fraudes de empleados", abarcan cualquier tipo de fraude perpetrado por alguien que trabaje dentro de la organización damnificada, como un empleado, gerente o ejecutivo. Dependiendo del nivel de acceso con el que cuente el autor del delito, los fraudes ocupacionales suelen resultar bastante dañinos y significan más del 40% de los casos de fraude con pérdidas de $100 millones o incluso más, según una encuesta realizada por PwC en 2020.
Detectar los indicios de fraudes ocupacionales
En términos generales, los fraudes ocupacionales ocurren a través de la corrupción, la malversación de fondos o fraudes en estados financieros. A menudo, el autor pasa desapercibido (y en muchos casos es un empleado de confianza o con un puesto fijo). De hecho, la ACFE descubrió que los autores de delitos internos que trabajan en la empresa damnificada desde hace al menos 10 años roban cuatro veces más que la mediana de empleados que trabajan desde hace menos de un año.
De acuerdo al criminólogo Donald R. Cressey, los criminales normalmente son motivados por tres factores, a los que comúnmente se los llama el triángulo del fraude:
- Oportunidad: el autor está al tanto de las debilidades del sistema, gracias a las cuales su fraude pasará inadvertido.
- Presión o motivación: el autor se enfrenta a algún tipo de presión, ya sea psicológica o financiera (como deudas o adicciones).
- Racionalización: el autor encuentra una excusa para justificar su comportamiento. Por ejemplo, "no me pagan lo que merezco" o "devolveré el dinero en algunas semanas, nadie se dará cuenta".
Habitualmente, los autores exhiben una combinación de cambios evidentes en su conducta y en su estilo de vida. Por ejemplo, en el 42% de los casos de fraudes internos que examinó la ACFE, el autor mostraba cambios significativos en su estilo de vida que superaban sus propios medios. Es importante remarcar que la compra de un auto nuevo y costoso o joyería fina no debería considerarse una señal de alarma inmediata. Generalmente, esto se da junto con otros cambios en la actitud. Por ejemplo, es posible que el empleado no quiera tomarse vacaciones o días por enfermedad, o incluso podrían volverse territoriales con su trabajo, rechazar la ayuda de otros para llevar a cabo sus tareas y ponerse a la defensiva cuando le hacen preguntas sencillas en cuanto a su productividad.
Cómo evitar fraudes ocupacionales
Una de las formas más efectivas de evitar fraudes internos es estableciendo controles antifraudes. Estos podrían incluir la implementación de políticas antifraudes, el establecimiento de un sistema de cheques y saldos, la capacitación de empleados y la puesta en escena de un programa de capacitación antifraudes para gerentes y ejecutivos. La ACFE detectó que aproximadamente un tercio de los casos de fraudes ocupacionales se dan por la ausencia de los controles antes mencionados. Esto es particularmente cierto en el caso de las organizaciones pequeñas, que tienden a ser más vulnerables a ciertos tipos de fraudes. La falsificación de cheques y pagos es cuatro veces más común en compañías con menos de 100 empleados y además estas compañías sufren las pérdidas medianas más elevadas relacionadas con fraudes internos.
Y aunque es más probable que las empresas de mayor envergadura cuenten con medidas de control interno, generalmente no tienen un sistema de cheques y saldos. De hecho, la ACFE descubrió que el 20% de los casos de fraudes internos en empresas con más de 100 empleados se dieron porque se desactivaron los controles internos existentes.
Tanto para grandes y pequeñas empresas, establecer un proceso de aprobación dual para transacciones financieras puede resultar altamente efectivo para desalentar fraudes internos. Y presenta otro beneficio: también es efectivo para prevenir tipos de fraudes externos comunes, incluyendo fraude en los pagos.
Por último, las organizaciones no deben subestimar la importancia de la capacitación de los empleados. Los programas de capacitación antifraudes no solo pueden ayudar a sus empleados a detectar indicios de potenciales fraudes, sino que también pueden ayudar a disuadir a posibles estafadores.
Para ver más consejos sobre cómo proteger su empresa contra fraudes internos y externos, visite regions.com/fraudprevention.