Si tiene un plan de salud patrocinado por el empleador, podrá ahorrar dinero abriendo una cuenta de gasto flexible o FSA.
¿Qué es una FSA?
La FSA es una cuenta en la que deposita dinero directamente desde el cheque de su salario, y el dinero se usa para reembolsar o ayudarlo a pagar los costos de salud elegibles que no están cubiertos por su plan dental o plan de seguro para la vista. Utilizar una FSA puede ahorrarle dinero ya que no tiene que pagar impuestos sobre los fondos allí que coloque.
Pautas para utilizar una FSA
En su FSA puede aportar un máximo de $2,600 por año y usar ese dinero para cubrir gastos de salud regulares y previsibles que usted o sus dependientes calificados puedan tener durante el transcurso del año. Su empleador puede requerir además una contribución mínima a su FSA. Lea atentamente los detalles de inscripción para ver si este es el caso.
En general, todos los gastos deben generarse durante el año del plan y presentarse para reembolso antes del día de declaración impositiva. Los gastos son elegibles si se consideran necesarios desde el punto de vista médico, conforme a las reglas del IRS, y no reembolsables por un plan de atención médica.
Los gastos médicos elegibles incluyen, entre otros:
- Deducibles, copagos y coseguros de su plan de cobertura médica
- Medicamentos recetados, incluso píldoras anticonceptivas
- Programas y medicamentos recetados para dejar de fumar
- Exámenes médicos de rutina
- Equipos médicos, como por ejemplo muletas
FSA de cuidado diario de dependientes
Las FSA de salud son las más comunes, pero hay otras FSA que pueden ayudarle a recuperar algunos de los gastos asociados con el cuidado de niños o de otros dependientes mientras usted trabaja o es estudiante por tiempo completo. Si es padre o madre soltero, es elegible para este tipo de FSA incluso si no trabaja tiempo completo.
Los fondos de la FSA para cuidado diario de dependientes son antes de impuestos y se pueden usar para gastos de cuidado diario para niños menores de 13 y que sean sus dependientes por razones impositivas. También pueden utilizarse para cualquier persona mayor de 13 años, que viva con usted al menos ocho horas al día, y que necesite cuidado supervisado (como un padre anciano o cónyuge o hijo discapacitado). Tenga en cuenta que los cargos por escuelas privadas y campamentos de verano no son elegibles para el reembolso.
A su cuenta FSA de cuidado diario puede aportar un máximo de $5,000 por año: $2,500 si está casado pero pagan impuestos por separado (las parejas casadas tienen un límite combinado de $5,000 incluso si pagan impuestos por separado). Y como sucede con la FSA, su empleador puede requerir una contribución mínima.
Si cualquier tipo de FSA le suena como una buena opción para usted, hable con alguien de recursos humanos para ver si su empleador las ofrece. Luego revise las pautas del IRS en las Publicaciones 502, 503 y 969 antes de configurar su cuenta y contribuir en cualquier tipo de FSA.
También puede conocer otras maneras de reducir sus costos de atención médica.