Posiblemente lo inquiete la posibilidad de que el fraude ponga en peligro sus cuentas financieras. Sin embargo, existen muchas formas de protegerse. Aquí le mostramos algunos consejos para reducir el riesgo.
- Controle sus cuentas. Consulte sus cuentas bancarias y de tarjeta de crédito regularmente para garantizar que no haya cargos no autorizados. Para detectar cargos fraudulentos rápidamente, controle sus cuentas de Online o Mobile Banking todos los días.
- Cambie las contraseñas de sus cuentas. Modifique las contraseñas de sus cuentas confidenciales de manera frecuente y asegúrese de no usar la misma contraseña para varias cuentas.
- Realice transacciones en línea con cuidado. Cuando compre en línea, asegúrese siempre de estar usando una conexión a Internet segura y evite usar Wi-Fi público.
- Confirme toda la comunicación financiera. Manténgase al tanto de las estafas comunes como el "phishing", proceso mediante el cual los estafadores envían correos electrónicos haciéndose pasar por un banco y le piden que actualice o confirme la información de su cuenta. Siempre contáctese con su banco directamente para garantizar que su información no caiga en las manos incorrectas. Además, recuerde que el IRS nunca iniciará el contacto con usted mediante correo electrónico, mensaje de texto o redes sociales para solicitarle información personal o financiera.
- Revise sus informes de crédito. Como mínimo una vez al año, consulte su reporte de crédito de Equifax, Experian y TransUnion para asegurarse de que toda su información esté actualizada y sus cuentas sean precisas. Puede acceder a su informe gratis todos los años desde AnnualCreditReport.com, pero no se confíe de los sitios que tienen un aspecto similar y le cobran cargos innecesarios.
- Controle su crédito. También es importante inscribirse en un servicio de monitoreo de crédito, que lo alerta inmediatamente de cualquier actividad relacionada con su historial crediticio y sus cuentas. Esto puede ser útil para detectar consultas sospechosas o robo de identidad.
- Deshágase de los documentos como corresponde. Si se deshace de estados de cuenta bancarios antiguos u otros documentos con información confidencial, como números de cuenta, números de seguro social, números de identificación personal, etc., asegúrese de triturar todos los papeles antes de desecharlos.
